Ante la llamada "Primavera Mexicana y la creciente participación de la juventud en los procesos electorales y los movimientos sociales.
Los jóvenes han despertado, han presentado su inconformidad ante las posturas de los gobiernos que solamente los mira en tiempos de elección, prometiendo grandes oportunidades de trabajo y participación en su administración.
Los jóvenes están hartos de la corrupción tan arraigada en la cultura del mexicano, aquella corrupción que permite que cualquier persona sin estudios ocupe un cargo de elección popular o en la administración pública , cuando miles de egresados universitarios se encuentran desempleados.
Los jóvenes no quieren ser acarreados de intereses partidistas, ahora los jóvenes quieren participar en la vida democrática.
Los jóvenes quieren ser la clave del crecimiento económico, social , político y educativo del país, unir fuerzas para derribar el muro de la corrupción que construyeron gobiernos pasados, los cuales establecieron practicas obscuras, antidemocráticas y viciadas por la ambición de unos cuantos.
Los jóvenes no los representan "movimientos" creados en escuelas burguesas, que después de la tormenta electoral, conducen programas en la televisoras que según " combatieron" .
Los jóvenes día con día realizan una lucha constante en sus estudios, no para ser el futuro si no el presente,dentro de un país con los ánimos hasta los suelos, cansado de tanta injusticia e inseguridad.
Los jóvenes exigen el cumplimiento de la ley, y que no sea un cuerpo de normas muertas y frías , que solo vuelven a la vida cuando van a hacer utilizadas por intereses de políticos, empresario y demás sujetos .
La participación de ellos es necesaria para una vida democrática, donde exista pluralidad de ideas y no se pretenda establecer un modo de pensar a través de los medios de comunicación de mayor circulación del país.
La credibilidad de estos medios ha ido en declive con la aparición de nuevos, como las redes sociales, las cuales tienen mas veracidad según los mexicanos que medios tradicionales.
En la actualidad la partición juvenil va en aumento, y no son representados por ningún movimiento, no somos 132, somos millones de jóvenes que queremos un cambio en la sociedad mexicana, desde un punto social, político y económico.
Al final de todo los jóvenes creen en movimientos que pretenden llevar a cabo las aspiraciones de cualquiera, sin embargo ante las ultimas acciones de Antonio Attolini del ITAM, solo dan falsas esperanzas a miles de jóvenes que quieren un México diferente.
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